Sabiendo que los abscesos dentales se deben principalmente a caries y pulpitis, la mejor manera de prevenirlos es:
- Mantenga sus dientes y encías saludables; trate de limitar el consumo de alimentos dulces y líquidos en las comidas
- Evite los dulces pegajosos, ya que se pegan a los dientes
- Cepíllese siempre los dientes después de las comidas, utilizando un dentífrico con flúor; si esto no es posible porque estás fuera de casa, hazlo nada más llegar
- Utiliza hilo dental para limpiar los espacios entre los dientes, o cepillos interdentales (siempre según las recomendaciones del dentista)
- Si algún diente tiene caries o dolor, acudir al dentista para tratarlo, y así evitar la formación de un absceso
- Acudir al dentista periódicamente, lo ideal es hacerse una revisión dental anual , realizar una sesión preventiva y, si es necesario, tratar cualquier problema de forma precoz.
Enjuague con agua salada
Un enjuague con agua salada puede ayudar a eliminar las bacterias y el pus de un absceso. El agua salada también puede aliviar las molestias.
Si bien el enjuague puede proporcionar algo de alivio cuando tiene un absceso, recuerde que el agua salada por sí sola no será suficiente para eliminar la infección.
Algunos afirman que colocar bolsitas de té de menta húmedas y frías sobre un diente con absceso ayudará a aliviar el dolor. Si bien colocar una bolsita de té frío sobre un absceso no duele, tampoco es probable que ayude. La temperatura fresca de la bolsita de té puede ser un poco reconfortante.
Si tienes algunas bolsitas de té a mano, puedes probar este remedio casero. Pero no debe confiar en él para curar su absceso.
Síntomas del absceso perianal
El síntoma principal del absceso perianal es el dolor que produce. Inicialmente es un dolor sordo, más dolor, que se vuelve más intenso a medida que el absceso aumenta de tamaño.
El paciente percibe una protuberancia en esta zona, generalmente lateralizada, una tumoración rojiza, caliente, con la piel estirada y dolorosa al tacto.
Por tratarse de una infección, pueden presentarse síntomas y signos de infección sistémica, como fiebre alta, escalofríos, malestar general, fatiga, dolor muscular y osteoarticular. Las deposiciones suelen ser dolorosas y, debido a la inflamación, puede producirse cierto grado de estreñimiento.




