El esmalte es translúcido, de color blanco o gris azulado. El color de los dientes lo da la dentina, un color que se nota a través del esmalte.
El color de la dentina está determinado genéticamente. Generalmente, los dientes son blancos, excepto en el borde incisal, donde predomina el color gris azulado del esmalte.
¿De qué factores depende el color de los dientes?
Al igual que con el color del pelo y de los ojos, que es diferente en cada persona, lo mismo ocurre con el color de los dientes. Estas características varían de persona a persona.
En el caso del cabello y los dientes, el paso del tiempo hará que el color inicial cambie, haciendo que el trasero se vuelva gris y los dientes más amarillos.
En primer lugar, podemos decir que el color de nuestros dientes está condicionado genéticamente. Se define por el color de la dentina y el espesor y calidad del esmalte:
El verdadero color de los dientes
Hay tres tipos de colores en la ficha blanca, valor, matriz y croma.
El valor hace referencia a la cantidad de luz que tiene el diente, es decir, determina la cantidad de luz que es reflejada por un color específico.
La matriz corresponde únicamente al color del diente, puede tener tonos amarillentos, grisáceos, entre muchos otros, también determina la longitud de onda reflejada por los dientes.
Finalmente, el croma se conoce como el grado de saturación que tiene el diente, es decir, la cantidad de color y pigmento.
Guía de colores dentales
Una de las guías de colores más comunes divide el color del diente en cuatro gamas básicas de color: A (marrón rojizo), B (amarillo rojizo), C (gris) y D ( gris rojizo).
Dentro de cada rango existen diferentes niveles de oscurecimiento, dando como resultado una imagen suficientemente detallada de los posibles colores dentales existentes. El 99,8% de las personas puede encontrar un color perfecto para sus dientes con esta guía.
¿Puedo hacerme un tratamiento de blanqueamiento dental?
El blanqueamiento lo puede realizar cualquier paciente que cumpla varias condiciones, ya que si bien no es un tratamiento invasivo, todos los pacientes deben tener una boca sana y sin enfermedades para someterse a este proceso.
- Debe tener dientes con encías sanas y libres de placa
- Higiene dental cuidada y óptima
- Los dientes no deben tener sarro, por eso es Higiene Dental, lo cual se recomienda hacer cada 6 meses.
- No deben tener cavidades ni ninguna obstrucción filtrada
